BUSCA MARÍA FERNANDA GONZÁLEZ UN ADIÓS DIGNO EN JUSTA OLÍMPICA
• Aprovecha nadadora mexiquense aplazamiento de Juegos Olímpicos.
• Retrasa contingencia sanitaria su retiro de la alta competencia, un año.
Para la nadadora mexiquense María Fernanda González Ramírez, el aplazamiento de los Juegos Olímpicos de Tokio a causa del COVID-19, le da una oportunidad más para buscar su calificación a la magna justa deportiva.
La atleta se vio obligada a parar sus entrenamientos y competencias a causa de una lesión en el hombro que la llevó al quirófano, por lo que ahora aprovechará el tiempo que le otorga esta situación que ocurre en el ámbito deportivo, por la pandemia.
“Para mí, de entrada, es un ganar-ganar, porque iba tarde en mi preparación a Juegos Olímpicos, estaba segura de que iba a tener que decir “no me dio tiempo”, sin embargo, cuando se escucha la noticia de que los Juegos Olímpicos estaban en peligro, empecé a visualizar y cuando dieron la noticia del aplazamiento, fue increíble”, declaró la nadadora del Edoméx.
González Ramírez sacó lo positivo de esta situación y dijo que hablando con seleccionados nacionales les comentó que son muchas ocasiones en las que hubieran querido cambiar algo de su preparación y que ésta es la oportunidad para hacer esas mejoras de cara a una contienda tan importante.
“Me dio un año más para poder entrenar, para prepararme mejor, porque en la Conade me habían dicho que no era necesario operarme, al final se dieron cuenta de que sí era muy necesaria la operación”, dijo la nadadora acerca de cómo ella aprovechará esta situación.
“Estoy entrenando dos veces al día en lo que puedo en mi casa, subiendo escaleras para hacer cardio, saltando, lo que puedo dentro de mis posibilidades y sin quejarnos siempre viendo el lado positivo”, explicó acerca del desarrollo de su plan de trabajo durante el confinamiento.
Finalmente, Fernanda González comentó que el retiro del alto rendimiento, que tenía planeado para este 2020, se verá atrasado hasta el desarrollo de la justa olímpica, ya que, a pesar de haber hablado con su esposo de la posibilidad de tener un hijo para finales de este año, decidieron como familia esperar el tiempo necesario, para que la nadadora cumpla el ciclo olímpico que marcaría su adiós de las albercas.